En una tarde de marzo como cualquiera, Brandin se encontraba pensando en que hacer durante el brote del coronavirus. Así que le ocurrió la fracasada idea de hacer “un experimento social” según el manifestó ante la policía.
Brandin publicó en Facebook que había dado positivo para covid-19 y que los doctores le habían dicho que este virus se propaga por el aire. A lo que al poco rato del post su comunidad reaccionó de manera solidaria y sorpresiva.
“Hubo bastantes reacciones al post y muchos amigos me enviaron mensajes preguntando si estaba bien, así que les dije que en realidad era mentira”, dijo Brandin.
¡Pero lo que estaba sucediendo offline era aún más grave!

El rumor empezó a expandirse rápidamente por las redes sociales y en el condado de Tyler en el estado de Texas, Estados Unidos, donde Brandin reside.
Esto ocurrió días antes que se dieran las reglas de confinamiento y varias personas llamaban al hospital para preguntar si las noticias eran cierta y recibir indicaciones de cómo debían protegerse.
Orden de arresto
Tras lo sucedido la policía se contactó con Michael, le ordenó que modificara su publicación y que aclarara ante sus fans que todo esto trataba de un experimento social. -Michael obedeció y de esa forma lo hizo-.
Sin embargo, esto ya se había descontrolado, el rumor se hizo cada vez más grande llegando a tal punto que el siguiente post de Facebook dentro de esta historia llegó desde la oficina del alguacil del condado de Tyler:
“Tras la denuncia oficial de la fiscalía del distrito, el juez del condado, Jacques Blanchett, emitió una orden de arresto contra Brandin por el delito de ‘falsa alarma’, una ofensa menor de clase A».
Brandin se entregó. Se fijó una fianza de US$1.000.
“Dijeron pasaría la noche en la cárcel porque debía esperar que el juez llegara al día siguiente. Estaba muy ansioso”, reconoce Brandin.

En una notificación pública, la oficina del alguacil dijo que dicha acción fue motivada por “la preocupación creciente por el coronavirus en Estados Unidos, que el presidente Donald Trump ha declarado como emergencia nacional al igual que el gobernador de Texas, Gregg Abbott».
Brandin fue puesto en libertad a la espera de ser citado por el juez. A pesar de lo grave que es la situación Brandin no está seguro si está arrepentido de lo que hizo.
“Soy graduado de Comunicación Social y quería comprobar qué tan fácil publicar algo en línea y sembrar el pánico. Quería probar por qué es tan importante que la gente se informe e investigue antes de asumir como cierto todo lo que escucha o lee”, explica Brandin.
El joven comenta, además, que gracias a Facebook perdió su trabajo y beneficios sanitarios, que no pudo iniciar su máster por falta de dinero y que se convirtió en una carga financiera para toda su familia, porque todos intentan ayudarle a pagar sus gastos.
“Aunque estas cosas sean negativas, comprobé lo que quería y eso me hace sentir bien», dice Brandin.